miércoles, 17 de febrero de 2010

Terrores ecuatorianos


De un tiempo a esta parte, Ecuador ha golpeado fuerte en la escena musical a través del entusiasmo de una serie de artistas (?) que, claramente, más que por el talento, llaman la atención por la astucia, picardía e inventiva. En su momento, nadie se resistió al encanto de Bayron Caicedo o a la ingenuidad de Delfín Quishpe. Tanto fue el éxito de estos cantautores latinoamericanos, que por estos días el autodenominado “duro del Ecuador” goza de una amplia discografía, todo tipo de galardones y de un espléndido y remozado sitio web que incluye una curiosa biografía (yo no fui capaz de terminarla, pero se las dejo acá en formato pdf por si alguien quiere leerla). Por otro lado, el genio incomprendido tras el hit Torres Gemelas luce con orgullo no una, sino dos generosas biografías en la red: la primera, en Wikipedia; la segunda, más lúdica y certera, en Inciclopedia.

Pero ahora no es un solista, sino una agrupación la que últimamente acapara toda mi atención. Una a la que día tras día intento seguirle la pista, pero por más que trato de recopilar información a través de esos insondables recovecos que brinda internet, nada saco en limpio. Sé que se llaman Los Conquistadores y que a estas alturas es un célebre conjunto ecuatoriano de música (?) alegre, tropical, con reminiscencias electrónicas y tintes andinos. Y créanme, es verdad, no hay nada sobre ellos en ese generoso manantial universal del saber popular y, para mí, referencia absoluta a la hora de iniciar un trabajo investigativo, Wikipedia; sí figura, en cambio, un gran número de portales y blogs, pero todos son de dudosa procedencia, ninguno entrega información biográfica de sus integrantes y menos aún se da notica alguna de futuros proyectos.

No conforme con esto, me animo a tratar de desvelar al menos uno de los misterios tras el renombre de estos monstruos del ritmo. Porque en el fondo sé que algo debe haber, estoy seguro, algún secretillo por pequeño que éste sea, el éxito no llega así como así. Por lo tanto, me armo de valor y me preparo a estudiar el que entiendo sería uno de sus mayores éxitos, "El Conejito", popularmente conocido como "My Conejito".

Corre video!




Inmediatamente puedo apreciar que acá hay algo menos que bajo presupuesto. Estos chicos si bien lucen un vestuario austero y pulcro, provocan una inmediata conmoción al exhibir un, si se puede llamar, diseño de utilería, pero de paupérrimo y mal ajustado acabado. Maquillaje y peluquería, ni hablar. No creo que el equipo de producción (si lo hubo) haya pensado en desembolsar algo de dinero en arrendar una adecuada locación, por eso, supongo, que se inclinaron por utilizar “a la mala” una plaza pública. No sé si estos Conquistadores hablan el castellano fluido, y, con el consiguiente riesgo de ser fuertemente criticado de superficial, me animo a decir que estos cuatro tipos son de las personas más feas que he visto en mi vida. O sea, todo es triste y cada vez más deprimente. Pero por otro lado, y rápidamente (atención!), logro comprender dónde radica la principal gracia de estos ecuatorianos y la respuesta es sencilla, casi obvia: ¡la coreografía! Ahí sí que hay trabajo y del duro. Ya quisiera cualquier cuerpo de baile de una compañía de ballet clásico que se precie como tal lucir semejante coordinación a la hora de ejecutar toda suerte de cabriolas y uno que otro, pero discreto, tour en l’air. Repito, ahí hay trabajo, sudor, horas de ensayos, porque eso no se logra tan a la ligera. No es casual. Yo, a modo de ejemplo y bien lo saben mis cercanos, e intentado en varias e infructuosas oportunidades ejecutar el difícil paso que con tanta soltura logran estos entusiastas de la danza en los 0’32’’ y que como si nada lo vuelven a repetir y... cinco veces más!!! (1’15’’, 1’43’’, 2’25, 3’13’’ y 3’39’’). O sea, estos tipos son realmente talentosos, virtuosos. Pero lo que más me gusta de este videoclip, más allá de las evidentes habilidades dancísticas, es que uno percibe que estos ecuatorianos disfrutan planamente con lo que hacen y lo hacen bien. Siempre juguetones y al son de un contagioso ritmo, te ofrecen una amplia (en el caso del vocalista más que amplia) y coqueta sonrisa. Es verdad que la lírica de su canción resulta ininteligible, los textos y las rimas no respetan formas ni estructuras, que, insisto, son feos a rabiar, sobre todo el cantante (?), y que no cuentan con el apoyo de una maquinaria económica sería que sustente sus inquietudes audiovisuales. Pero por sobre toda esa pesimista realidad, que deben desafiar a diario y frente a la que a cualquier ser humano normal se desanimaría al primer intento, estos “conquistadores” del ritmo rompen con la lógica del sistema, de la vida, y te sorprenden primero con esa implacable expresión facial y luego te devuelven el golpe, pero de la manera menos esperada, con unos pasos que ni la misma Terpsícore, quién se debe estar revolcando en el Olimpo, se imaginó jamás.


Saludos!




pd: No quise dejar esta breve reseña a medias y me atreví con un intento de traducción al castellano de lo que, con mucha imaginación, logro entender del videoclip antes ofrecido. Lo comparto con Uds.


(palabras de bienvenida, improvisadas)

Ay! mi conejito era tan banidó, ay! caramba,
Ay! mi conejito era tan banidó, ay! caramba,
Subiendo a la cama, no quiso bajar, ay! caramba,
Subiendo a la cama, no quiso bajar, ay! caramba,
A la medianoche llegó sin calzón, ay! caramba,
A la medianoche llegó sin calzón, ay! carambaaaaaaa!!!!!

(improvisación)

Ay! mi conejito era tan banidó, ay! caramba,
Ay! mi conejito era tan banidó, ay! caramba,
A mi me decía, se va a Guayaquil, ay! caramba,
A mi me decía, se va a Guayaquil, ay! caramba,
Robando la novia de mi coronel, ay! caramba,
Robando la novia de mi coronel, ay! carambaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!


(otras diversas improvisaciones)

Ay! mi conejito era tan banidó, ay! caramba
Ay! mi conejito era tan banidó, ay! caramba
Y(?) de una soltera se va a enamorar, ay! caramba
Y (?) de una soltera se va a enamorar, ay! caramba
Ay! mi conejito era tan picarón, ay! caramba,
Ay! mi conejito era tan picarón, ay, carambaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!


(algunos versos libres)

Ay! mi conejito era tan banidó, ay! caramba
Ay! mi conejito era tan banidó, ay! caramba
Subiendo la cama, no quiso bajar, ay! caramba
Subiendo la cama, no quiso bajar, ay! caramba
A la medianoche llegó sin calzón, ay! caramba
A la medianoche llegó sin calzón, ay! carambaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!



(palabras al cierre)

1 comentario:

  1. Interesante propuesta musical digna de análisis. Por mi parte haré observaciones de un simple aficionado a la música y poseedor de un espíritu científico. Primero, el paso de baile. Si alguna rama ultra secreta del ejército estadounidense quisiera probar fuera de su país la clonación de seres humanos, y eligiera a Chile, como lo ha hecho para otros experimentos e intervenciones, y buscara a un individuo que debido a su notable egocentrismo se ofreciera de voluntario para verse replicado, cabría la posibilidad de que el individuo elegido fuera Antonio Vodanovich . Supongamos que luego el equipo de científicos logra crear dos copias del legendario animador, y los sometiera a pruebas de coordinación y seleccionara, al azar, esta notable coreografía creada por "Los Conquistadores"; pues bien, dudo seriamente que tres Vodanovich lograrían tal nivel de descoordinación como sí lo han hecho los autores originales. Pero esta aparente descoordinación no es más que un alevoso despiste. Segundo: la canción. No puedo menos que pensar que hay una fuerte conexión entre lo presentado y antiquísimas canciones ceremoniales del Imperio Incaico. Me atrevo a sugerir que los ritmos tenían como función invocar a los dioses. Bueno, ¿Y que tal si esos dioses fueran seres de otros mundos? ¿Por qué no dejar esos trillados "Greys" de oscuros ojos almendrados y otros marcianos de segunda y pensar en seres supercivilizados de grandes orejas y menuda cola?. Ojo con este conejo:

    http://asiandaelmundo.blogspot.com/2007/12/capturan-conejo-gigante-en-australia.html

    Imaginen queridos lectores este espécimen antropomorfizado y descendiendo de una plateada y redondeada nave espacial, con lento y majestuoso andar y cubierto por un traje espacial BLANCO Y BRILLANTE...¡Ajá!, pienso que nos vamos acercando a la verdad. Ahora fíjense en el nombre del cuestionado grupo musical: "Los Conquistadores"...Otra pista más. ¿Serán estos seres-conejo(conejo sólo por analogía) una raza que ha conquistado una serie de otros mundos y que en todos ellos han dejado una indeleble huella que aun hace eco hasta nuestros días? Pues son "Los Conquistadores" y no otra banda quienes han logrado rescatar este importantísimo legado. ¿2012? Sí, será justamente el 22 de diciembre ddel mencionado año cuando Los Conquistadores dejarán de lado su aparente descoordinación y letra sin sentido para retomar este llamado místico en su correcta interpretación y dejar que esta raza alienígena tome las riendas de nuestro mundo. Desde ya, este humilde terrícola les dice: ¡Salven Conquistadores!

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